Tratar con ha delicada cuespión de perder un hijo, en Walcome To The Rileys he permite a Jake Scott demostrar que es perfectamente capaz de entender los asuntos delicados, la adición de un agudo sentido de realismo a la agorafobia y el adulterio, los mecanismos de defensa Doug (Gandolfini) y Lois (Leo) de adoptar luego de la muerte de su hija.
Con la negatividad de la situación de la pareja puesta en un lugar de espesor y rápido desde el principio, puede parecer como algo natural, algo que sirve como una indicación más evidente de que esto no va a ser un viaje particularmente fácil para cualquier persona involucrada.
Introduciendonos en Doug como un hombre que lucha en una multitud y Lois como una mujer que no puede aventurarse tan lejos de su casa, para comprobar el correo, en sus treinta años de matrimonio no tiene sentido la comunicación más allá del nivel de las caras, con una interacción artificial y torpe. Después de aventurarse a Nueva Orleans para una conferencia de trabajo, Doug escapa , encontrando consuelo en un bar donde conoce a una joven stripper, Mallory (Stewart). Con algunos momentos de gran comedia sutiles entre ellos, formaron una amistad poco convencional y, aunque nunca del todo asumiendo el papel de padre, Gandolfini lleva una mezcla de preocupación y tierna de instinto paternal.
Mallory ha encontrado una inesperada sensación de seguridad en Doug y, a veces le resulta muy difícil que le diga qué hacer, Stewart mantiene sólo el lado irritante y un rendimiento intuitivo. La vulnerabilidad de Mallory es evidente en todo, nunca Stewart nos permite creer que es irrompible y la elección de dejar de lado un montón de detalles de su vida, afortunadamente resta valor a cualquier historia potencial.
Una película bastante tranquila, el ritmo realmente recoge una vez que Lois toma la decisión de conducir a Nueva Orleans. Aunque la idea de las fronteras estatales que cruzan es difícil de entender para Louis, que demuestra hasta qué punto su matrimonio significa para ella, encontrando que no es imposible de asumir una posición materna una vez que ella entra en la casa de Doug y se encuentra con Mallory.
Hay un poco de atención impresionante en la forma que Lois pone la ropa interior de Mallory en la cama y corta las etiquetas, una actividad muy sutil, pero real de una madre Aunque Lois y la adolescente se están tratando como dos mundos aparte , Mallory no siempre se resiste a la maternidad, lo que resulta en algunos momentos muy tierno. Y lo unico que se espera es que la stripper nerviosa pueda hacer frente a las instrucciones, entonces, una confrontación golpea un lugar fundamental en la participación de las dos.
La elección de Scott, con el guionista Ken Hixon, de optar por un final que posiblemente no se podría esperar también es totalmente bienvenioa. Bajo su dirección muy capaz, Welcome To The Rileys golpea su paso cuando se tiene un poco de diversión, pero es en última instancia, un poco difícil de recordar en el gran esquema de las cosas.
Fuente: heyuguys
Vía y Traduccion: Twilight Argentina
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