CB: El director de la Pecícula, Bill Condon, dijo que trajo una parte muy paternal y maternal de Rob y Kristen en el set —aparte de su toma de posesión! ¿Estás de acuerdo?
TH: Sí, Mackenzie tenía un tarro de maldiciones, así que cada maldición era un dólar Alguna persona dijo, “Te doy 20 dólares ahora antes de comenzar a trabajar.” Así que, ella nos puso a todos en forma con nuestras bocas sucias.
CB: ¿Cómo fue trabajar con estrellas como Robert y Kristen?
TH: Fue bueno porque ellos, ambos tienen los pies en la tierra. Da miedo ir al set con unos nombres tan grandes. Quiero decir, cuando eres el número uno en IMDB, es un poco intimidante. Pero no eran más que geniales, y Kristen era como un marimacho y muy con los pies en la tierra. Rob era de la misma forma. Él tiene en realidad esto cosa casi autocrítico, ‘Oh, acabo de decir eso?’ Y entiendo porque lo hizo, porque hizo sentir a todos comodos. Así que gracias, Robert!
CB: ¿Cómo fue la última escena de las series? ¿Hubo lágrimas en el set?
TH: Sí, especialmente cuando regresamos a volver a hacer esas tomas de nuevo. Fue realmente como, ‘Esto ya se termino ahora.’ Fue realmente duro. Sientes como un vacio cuando todo se termina. No importa cuánto hayas estado en la película o no en la película, pasamos mucho tiempo juntos. Todos desde la gente detrás de escena y guardarropa, etc. hicieron el set suceder. Siendo honesta: todos tenemos un poco de niebla — incluso Rob y Kristen.
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